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El Dassault Falcon 900 fue adquirido ilegalmente por el régimen de Nicolás Maduro por $13 millones de dólares según las autoridades
El gobierno de Venezuela informó este lunes que tomará acciones legales por la confiscación del avión oficial de Nicolás Maduro, incautado en República Dominicana bajo orden de las autoridades de Estados Unidos.
Esta medida se ejecutó en el contexto de las sanciones impuestas a Caracas por Washington.
El Ejecutivo venezolano, en un comunicado, calificó la confiscación como un acto de piratería y señaló que se reserva el derecho de emprender cualquier acción legal necesaria. Describió además la política estadounidense como criminal y delincuencial.
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Según las autoridades, el Dassault Falcon 900 fue adquirido ilegalmente por $13 millones de dólares y Maduro y personas cercanas a su gobierno lo han usado desde su adquisición.
El Departamento de Justicia sostiene que la aeronave fue comprada a través de una empresa fantasma y posteriormente exportada ilegalmente desde Estados Unidos hacia Venezuela.
Por su parte, el régimen venezolano acusa a Estados Unidos de utilizar su poder económico y militar para presionar a otros países a colaborar en acciones que violan el derecho internacional. En este caso, el chavismo se refería a República Dominicana, donde permanecía el jet desde mayo.
El Dassault Falcon 900, equivalente al Air Force One de Venezuela, fue confiscado por violaciones a las sanciones. Foto: Cristóbal Herrera-Ulashkevich / EFE
Caracas además considera que esta confiscación es parte de una escalada de medidas en su contra, especialmente después de las elecciones del 28 de julio, cuyo resultado ha sido cuestionado por varios países y la oposición democrática venezolana.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, afirmó que continuará persiguiendo a aquellos que violen las sanciones y controles de exportación, y aseguró que no permitirán el uso de recursos estadounidenses para comprometer la seguridad nacional.