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Aunque las investigaciones anunciaron la condena de los involucrados todavía se desconoce la identidad de los jugadores
Un tribunal de Panamá imputó cargos este miércoles a dos futbolistas en activo y a un exjugador por el presunto amaño de partidos en la Liga Panameña de Fútbol (LPF) y en la Segunda División de Panamá (Liga Prom), y ordenó la detención preventiva a uno de ellos.
Las medidas cautelares de reporte periódico y la detención preventiva fueron emitidas por un Juez de Garantías, durante una audiencia celebrada hoy en la que fueron imputados por el delito contra el orden económico.
“Fiscalía contra la Delincuencia Organizada logra la imputación de cargos por delito contra el orden económico a dos jugadores y un exjugador de fútbol, además el reporte (periódico ante la autoridad) para los jugadores y para el exjugador la detención provisional”, informó en X el Ministerio Público (MP, Fiscalía).
Los tres acusados, que no han sido identificados oficialmente, fueron arrestados el martes pasado en el ámbito de la denominada ‘Operación Garra’, luego de que hace un año la propia Federación Panameña de Fútbol (Fepafut) denunciase que llevaba tiempo tratando de combatir estos amaños de resultados.
El Fiscal Superior contra la Delincuencia Organizada, Emeldo Márquez, que lleva esta investigación, dijo el martes en rueda de prensa que los acusados “ofrecían y prometían a jugadores actuales de la liga, montos de dinero que oscilaban entre $1,500 hasta los $4,500 dólares, a fin de que tuvieran resultados en los partidos por tiempo, o resultado final”.
Cantidades, indicó el Fiscal, que eran pagadas “inmediatamente culminaban los partidos (…) a los jugadores que participaban en estas situaciones irregulares”.
El delito del que se les acusa, anotó Márquez, tiene una pena que va de los 2 a 4 años de prisión, y aunque la mayoría de los pagos se hacían “en efectivo”, también se utilizó el pago a través de moneda digital, en estos casos de Bitcoin.
La Fepafut señaló el martes en un comunicado que “las personas involucradas quedan suspendidas temporalmente de toda actividad que tenga que ver con el fútbol federado en Panamá mientras continúen las investigaciones del Ministerio Público”.
El presidente de la Federación, Manuel Arias, aclaró que la “FIFA está al tanto de todas las investigaciones, de todo lo que se ha hecho”.
Hace un año, Arias ya había advertido que “muchos jugadores” habían sido separados o suspendidos por su posible implicación en estos amaños, y que llevaban dos años y medio, con la creación de una Oficina de Integridad en la Fepafut, tratando de combatir algo que “es parte de la vida del fútbol” en todos los países en donde este deporte se profesionaliza.
La polémica había estallado días antes en Panamá, después de que el entrenador anglo-panameño Gary Stempel denunciara que hacía más de un año que en el país centroamericano se producían amaños de partidos, algo que definió como “una crisis del fútbol panameño”.