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Tras ser interceptados en espacio aéreo internacional sobre el Ártico por cazas rusos, dos bombarderos B-52H de la Fuerza Aérea de EE.UU. (USAF) han arribado a la Base Aérea Mihail Kogalniceanu, Rumania, para unirse a la Fuerza de Tarea de Bombardeo 24-4 allí desplegada. Particularmente, ambas aeronaves formarán parte del 20º Escuadrón de Bombardeo Expedicionario bajo la órbita del Comando Europeo de EE.UU. y serán desplegadas en conjunto con activos de la OTAN en diversas actividades para fortalecer las capacidades combinadas.
Al respecto el general James Hecker, comandante de USAFE-AFAFRICA, afirmó: “En el entorno global actual, es vital que estemos preparados para ofrecer una gama de capacidades sostenibles desde grandes distancias. Esta iteración de la Fuerza de Tareas de Bombarderos ofrece una excelente oportunidad para perfeccionar nuestras tácticas, técnicas y procedimientos ágiles de empleo en combate (…) A través de esfuerzos de colaboración con nuestros aliados, Estados Unidos permite a nuestras fuerzas combatir las amenazas actuales y futuras.”
Tal y como se ha mencionado, los dos bombarderos B-52H ahora asentados en Rumania habían sido interceptados por cazas rusos sobre el Ártico, particularmente por dos cazas MiG-29 y MiG-31. El incidente había tenido lugar en el curso de la mañana (a las 8 a.m. hora central europea) del día 21 de julio, mientras las aeronaves de la USAF sobrevolaban el Mar de Barents en un vuelo rutinario, parte de los constantes despliegues en el teatro europeo para aumentar la disuasión en medio del aumento de las tensiones con Rusia.
Siguiendo esa línea, el propio general Hecker manifestó: “Estados Unidos está comprometido a trabajar junto con nuestros aliados y socios de la OTAN a lo largo del flanco oriental para garantizar que tengamos las habilidades combinadas y las capacidades de coordinación necesarias para mantener la seguridad y la estabilidad regionales.“
Cabe recordar, que esta es la primera vez en la que se observa el despliegue de bombarderos B-52H en territorio rumano, aunque no son los primeros activos aéreos que otros miembros de la alianza operan desde dicho país. Recientemente, siete cazas F/A-18 Hornet finlandeses llegaron a la misma base aérea para realizar misiones de policía aérea (los cuáles escoltaron a los bombarderos estadounidenses en cuestión), mientras que en el mes de abril fueron cazas Eurofighter británicos y F-16 polacos los que se asentaron en Rumania para la realización del ejercicio Astral Knight; dando cuenta de el alto grado de actividad que se maneja en la Base Aérea Mihail Kogalniceanu.