El también imputado en el expediente de corrupción y testigo del Ministerio Público, afirmó que era una de las maneras de que pasaran pagos irregulares
El mayor del Ejército Raúl Alejandro Girón Jiménez continuó «cantando» en el juicio de fondo a los militares y policías acusados en el caso Coral, en cuyas declaraciones reveló que, para que el entramado de corrupción se gestara «había que tener comprado» a personas en la Unidad Interna de la Contraloría General de la República porque, de lo contrario, «obviamente que en algún punto iba a haber un tranque en el proceso y las cosas no iban avanzar».
El alto oficial militar, que regularmente acude a audiencia fuertemente custodiado y hasta transformado físicamente, denunció ante el tribunal «la corrupción» que existe en la Policía con los pagos de especialísimos y que hace que policías tengan pensiones exorbitantes en comparacion a las de compañeros con el mismo rango.
Dijo que ese era uno de los atractivos para los miembros de la Policía entrar a la trama y entregar su salario casi completo a la red con el fin de que se le sumara para las pensiones. «Ese negocio lo empezó el coronel Rafael Núñez de Aza», con otro policía fallecido, dijo Girón.
Núñez de Aza es señalado por el Ministerio Público como el «cerebro» del entramado de corrupción en el que se habría estafado al Estado con más de 4,500 millones de pesos a través del Cuerpo de Seguridad Presidencial (Cusep), el Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur) y el Consejo Nacional de Niñez y Adolescencia (Conani), y que según el Ministerio Público, dirigían el mayor general del Ejército Adán Cáceres, el general Juan Carlos Torres Robiou y la esposa de este, Greybby María Cuello Coste, respectivamente. Cuello Coste no está acusada en el caso.
Pidió disculpa y alega se jugó la vida
En su defensa material, Girón Jiménez narró en las últimas dos audiencias del juicio de fondo, el jueves 1 y el martes 6 de agosto, que entró en el entramado como ayudante de nómina en el 2005 en el Cestur, hoy Politur. Agregó que cuando «llega el señor Rafael Núñez de Aza como auditor y se hace cargo de la nómina» este ordena que el dinero de un personal que se excluyó de esa institución y que no se sustituyó por otro se le entregara y le explicaría cómo se haría.
«Luego él me ordena buscar a una persona, ya él tenía esos fondos identificados, que recuerdo eran unos setescientos mil y pico de pesos y me ordena buscar a una persona para ponerle ese dinero, para que esa persona entonces lo recoja del banco y se lo entregue a él», narró.
Identificó a Erickson Bren Rosario, quien se mantuvo trabajando también en el departamento de nómina desde el 2005 hasta el 2021, cuando se hace la Operación Coral.
«Nunca he manejado esto de forma sola, sino en conjunto con esa persona (Erickson Bren Rosario) que le mencioné, que es, como nosotros le llamamos en el entramado, una cabeza recolectora, así como otros más y demás miembros del departamento financiero. Cada vez que había que entregar un dinero íbamos en conjunto donde el señor Rafael Núñez a entregar ese dinero, nunca lo hice solo», agregó.
Por la cantidad de dinero, entró a la trama la gerente del Banreservas de la sucursal de Venezuela, Nurys Lantigua, jefa de la acusada Esmeralda Ortega Polanco.
Núñez de Aza le presentó a Lantigua. «Porque era mucho dinero necesitábamos una sucursal bancaria donde se garantizara que una vez se recolectara todo ese dinero se pudiese recoger, la señora Nurys Lantigua, que era la jefa de Esmeraslda Ortega Polanco, era quien en principio nos entregaba todo ese dinero. En cambio de eso ¿qué yo tenía que hacer? Ella solicitaba unos préstamos en el banco y dentro de mis funciones el coronel Núñez de Aza me ordenaba pagarlos».
Pidió perdón a la sociedad y aseguró que «quien lo ve desde fuera no lo entiende» porque él arriesgó su vida guardando todas las pruebas año tras años, mensajes de WhatsApp que nunca borró.
- «Yo me jugué la vida porque mientras que yo sabía que lo que estaba haciendo estaba mal y tenía que hacerlo, pues la otra alternativa no era buena, era no estar vivo. Yo fui guardando las pruebas, fui guardando las evidencias».
Para eso, «afortunadamente» guardó desde la primera instrucción que se le dio hasta la última todo en WhatsApp.
Celulares Iphone del último modelo
Raúl Alejandro Girón Jiménez volvió a citar que cada año los jefes «anillos del grupo», incluida la exgerente del Banreservas, Esmeralda Ortega Polanco, mandaban a comprar con él, a través de Núñez de Aza, los celulares que lanzaba Apple y el mismo día que salían al mercado.
Anteriormente, había dicho que el costo de los celulares ascendían hasta a cuatro millones de pesos.