Por . 
Richard Simmons fue conocido por su energía contagiosa y su impacto positivo en la salud de millones de personas
El carismático y legendario gurú del fitness en Estados Unidos, Richard Simmons, conocido por su energía contagiosa y su impacto positivo en la salud de millones de personas, murió a los 76 años el 13 de julio, un día después de su cumpleaños.
Simmons falleció en su casa de Los Ángeles, así lo confirmó su publicista Tom Estey en un correo electrónico a la agencia de noticias AP, donde no reveló más detalles.
Fuentes oficiales informaron al portal TMZ que la policía y los bomberos respondieron a una llamada de su ama de llaves poco antes de las 10:00 horas, donde fue declarado sin vida.
Hasta el momento todo apunta a que su deceso fue por muerte natural, aunque la policía agregó que la celebridad de televisión tuvo una caída el viernes por la noche.
La muerte de Richard Simmons deja un vacío en el mundo del ejercicio y el bienestar, donde se destacó no solo por sus programas de fitness, sino también por su personalidad colorida y su capacidad para motivar a otros.
En marzo de este año reveló a sus seguidores que le habían diagnosticado cáncer de piel. En sus redes sociales, detalló el momento en que se enteró del diagnóstico y el procedimiento al que se sometió para intentar eliminar las células cancerígenas.
¿Quién fue Richard Simmons?
Richard Simmons nació el 12 de julio de 1948 en Nueva Orleans, Luisiana. En las décadas de 1980 y 1990 se hizo famoso gracias a sus vídeos de ejercicio, libros y apariciones en televisión, donde promovía un estilo de vida activo y saludable con entusiasmo incomparable. A lo largo de su carrera, fue un defensor apasionado de la salud mental y física, animando a las personas a adoptar hábitos positivos y a cuidar de sí mismos.
Compartió sus consejos para perder peso como anfitrión del programa diurno ‘The Richard Simmons Show’, ganador de un Emmy, y autor de libros de gran éxito de ventas y del plan de dieta Deal-A-Meal.
También abrió gimnasios y protagonizó videos de ejercicios, como la línea “Sweatin’ to the Oldies”, misma que tuvo gran éxito y se convirtió en un fenómeno cultural.
Aunque en sus últimos años se mantuvo más alejado de la vida pública, Simmons dejó una huella imborrable en la industria del fitness y en los corazones de aquellos que encontraron inspiración en su mensaje de salud y felicidad. Su legado perdurará a través de las vidas que tocó y las sonrisas que ayudó a crear.