Por . 
Un dominicano fue sentenciado tras declararse culpable de dispararle a un paciente también latino en una sala de emergencias en NYC
Keber Martínez fue sentenciado tras declararse culpable de dispararle al paciente Rubén Pérez en la sala de emergencias del Jacobi Medical Center en El Bronx (NYC).
La balacera se produjo cuando varias personas adultas, niños y hasta bebés se encontraban en el hospital, la noche del 25 de enero de 2022. Milagrosamente sólo un hombre resultó herido, mientras decenas de miembros del personal y pacientes corrieron en busca de refugio. La balacera fue captada en un video de seguridad; se recomienda prudencia al verlo.
El dominicano Martínez (25) fue sentenciado ayer a 12 años de cárcel después de declararse culpable de agresión. También tendrá que someterse a 5 años de supervisión posterior a su liberación, acotó New York Post.
“El acusado abrió fuego dentro de la sala de emergencias de Jacobi, hiriendo a un hombre y mostrando un total desprecio por los pacientes y el personal, y una bala se alojó en una pared cerca de una mujer que sostenía a un bebé”, recordó la fiscal de distrito de El Bronx, Darcel Clark.
Las imágenes de vigilancia captaron a Martínez con una sudadera con capucha oscura de pie cerca de un escritorio dentro de la sala de espera de emergencias. Luego sacó un arma y corrió hacia otro hombre mientras disparaba cuatro veces a la víctima de 35 años, quien recibió un balazo en el brazo izquierdo. Se cree que ambos se conocían.
El pistolero hispano huyó, pero fue capturado unas 12 horas después en Harlem, después de que su hermana llamara al 911 para informar que estaba actuando de manera errática, oía voces y tenía un arma, informó NBC News.
“Éste fue un acto reprobable, que empeoró aún más por el hecho de que sucedió en un lugar donde los neoyorquinos van por seguridad y para curarse”, dijo el entonces nuevo alcalde Eric Adams en Twitter, anunciando que visitaría el hospital.
La violencia armada es contante en Nueva York y algunas víctimas son alcanzadas al azar en calles, escuelas, el transporte público y negocios. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con una batalla entre pandilleros por el territorio y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.
Esta semana dos adolescentes fueron detenidos por recientes homicidios con armas de fuego en Queens y el Bajo Manhattan. Previamente al menos cinco hispanos murieron baleados en Nueva York en menos de una semana.